Hay muchos tipos de escarabajos ambrosía. Por lo general, estos escarabajos atacan a los árboles debilitados y estresados, algunos incluso impactan en la madera recién cortada. Son conocidos por hacer agujeros en la albura o en los anillos exteriores de un árbol, poner huevos y plantar una especie de hongo compatible para que sus larvas se alimenten cuando emerjan.
Los escarabajos de la ambrosía de laurel rojo, Xyleborus glabratus, se han adaptado para atacar específicamente a los árboles de la familia Lauraceae y son especialistas en el transporte del hongo del marchitamiento del laurel, Raffaelea lauricola. Una enfermedad mortal para los laureles.
Los árboles que son susceptibles y están en riesgo incluyen plantas de laurel rojo, sasafrass y aguacate. Los escarabajos ambrosía de Redbay son nativos de India, Japón, Myanmar y Taiwán, y se detectaron por primera vez en los EE. UU. en 2005.

Identificación
Los escarabajos de ambrosía de bahía roja son extremadamente pequeños y difíciles de diferenciar de otras especies de ambrosía sin un microscopio. Tienen un cuerpo largo y cilíndrico que va desde el marrón oscuro hasta el color almendra.
La observación minuciosa de un árbol puede revelar los insectos, pero puede notar rastros de su actividad antes de ver realmente cualquier escarabajo. Se pueden ver pequeños agujeros del tamaño de un alfiler en el tronco del árbol o en los tubos de aserrín compactado.
Administración
No existen tratamientos comprobados para el manejo de los escarabajos de ambrosía de la bahía roja. Mantener la salud de los árboles puede reducir la infestación, pero la prevención de la madera infestada e infectada es la estrategia principal para reducir la propagación de los escarabajos rojos de la ambrosía y el marchitamiento del laurel.
Se ha demostrado que la aplicación de productos químicos como la verbenona y el salicilato de metilo repele eficazmente los escarabajos de la ambrosía de bahía roja (Hughes, Martini, et al., 2017) y podría usarse como parte de estrategias de empuje y tracción, aquellas en las que se usan un atrayente y un repelente simultáneamente (Martini et al., 2020; Rivera et al., 2020).
La concienciación y la participación del público podrían ayudar a limitar la propagación del complejo de insectos y hongos. Comprar leña localmente donde planea quemarla, así como evitar el transporte de leña a campamentos o parques, es clave.